Esta vez quiero que leas este post que tal vez termine significando tu compromiso con la justicia y la libertad para todos los seres de este planeta que sienten, aman, sufren y viven sometidos a un sólo rey, injusto y tirano: el hombre.
Ser voluntario es estar comprometido con una causa que ha sido elegida libremente y por el solo hecho de querer mejorar como ser humano.
El voluntariado es la actividad más noble porque es la decisión de donar tiempo, esfuerzo y responsabilidad, que es lo más valioso que tenemos en nuestra vida. Y esa es la cuestión: destinar parte de nuestra vida, día a día, a construir un mundo mejor y un mejor estilo de vida para la sociedad.
¿Qué hace del voluntariado una expresión plena de nuestra libertad? ¿Qué lo transforma en un hito en nuestras vidas que marcará un antes y un después? ¿Cómo esta decisión amplía nuestro escueto paso por la vida, en un hecho que traspasará nuestro tiempo físico, dejando una estela cuando hayamos partido? ¿Cuál es la médula de nuestro ser, que nos unifica, que nos conecta con otros a nuestro alrededor, que nos apasiona, que nos hace sentir vivos, que justifica al menos uno de nuestros días?
Todo ser humano tiene actividades o hobbys que responden a una o más de una de estas preguntas. Si sos voluntario, el solo hecho de una elección y compromiso que emanará de tu libertad, será respuesta a todas.
Hay actividades que son generalmente obligatorias, como el trabajo, sin embargo, el voluntariado es una elección se gesta en el centro mismo de nuestro ego, en el buen sentido de la palabra, se manifiesta como una elección excelsa por su libertad y, por ello, conlleva un estado de plenitud único.
No todo es grato en ningún voluntariado, todos lidian con lo que generalmente parte del hombre ha producido, como especie y, si partimos de la base que son causas que necesitan de nuestro auxilio, sabremos que estamos comprometiéndonos con tareas y momentos que en mayor parte son difíciles, dolorosos y, a veces, nos llevan hasta un límite impensado de sufrimiento.
En nuestro caso, rescatar a un felino lastimado, al borde de su vida, o aún con pocas horas de nacido, no solo duele por la situación en sí misma, sino porque refleja la situación de la sociedad.
Por esto, como voluntarias nos comprometemos a auxiliar al desprotegido, a reparar un daño natural, a accionar en otras tantas causas que necesitan de nosotros desde nuestro trabajo, nuestro conocimiento, nuestra profesión, nuestra voluntad. Es aportar lo nuestro en pos de algo muy grande porque no estamos solos… cada vez son más quienes se dan cuenta de la importancia de participar para construir una sociedad mejor porque la acción y la participación da los resultados que la crítica no está dando.
¡Espero que leas estas líneas con esperanza, decisión y te sumes!
Podés ser un voluntario en el Hogar Lourdes o en la institución o causa que merezca que dediques tus horas libres en pos de un mundo mejor… hay un antes y un después de esta decisión… los voluntarios no sentimos que “nos falta algo”… nuestra vida está plena.
Pongo toda mi esperanza en quienes lean estas líneas pues creo firmemente en un mundo mejor, como creo que los sueños pueden ser reales si estamos decididos a cruzar las barreras que nos separan de ellos.
Ser un voluntario es tu decisión, es parte del cambio que la sociedad necesita. Un acto que expresa la libertad y lo que verdaderamente somos, lo que nos hace ser únicos e irrepetibles.
¡El Hogar Lourdes te espera!
¡Hoy puede ser un día que recordarás en tu vida si decides ser un voluntario!
Arq. Sandra Cortés
Fundadora Hogar Lourdes
Celular 011- 15-5183-5168
El voluntariado es la actividad más noble porque es la decisión de donar tiempo, esfuerzo y responsabilidad, que es lo más valioso que tenemos en nuestra vida. Y esa es la cuestión: destinar parte de nuestra vida, día a día, a construir un mundo mejor y un mejor estilo de vida para la sociedad.
¿Qué hace del voluntariado una expresión plena de nuestra libertad? ¿Qué lo transforma en un hito en nuestras vidas que marcará un antes y un después? ¿Cómo esta decisión amplía nuestro escueto paso por la vida, en un hecho que traspasará nuestro tiempo físico, dejando una estela cuando hayamos partido? ¿Cuál es la médula de nuestro ser, que nos unifica, que nos conecta con otros a nuestro alrededor, que nos apasiona, que nos hace sentir vivos, que justifica al menos uno de nuestros días?
Todo ser humano tiene actividades o hobbys que responden a una o más de una de estas preguntas. Si sos voluntario, el solo hecho de una elección y compromiso que emanará de tu libertad, será respuesta a todas.
Hay actividades que son generalmente obligatorias, como el trabajo, sin embargo, el voluntariado es una elección se gesta en el centro mismo de nuestro ego, en el buen sentido de la palabra, se manifiesta como una elección excelsa por su libertad y, por ello, conlleva un estado de plenitud único.
No todo es grato en ningún voluntariado, todos lidian con lo que generalmente parte del hombre ha producido, como especie y, si partimos de la base que son causas que necesitan de nuestro auxilio, sabremos que estamos comprometiéndonos con tareas y momentos que en mayor parte son difíciles, dolorosos y, a veces, nos llevan hasta un límite impensado de sufrimiento.
En nuestro caso, rescatar a un felino lastimado, al borde de su vida, o aún con pocas horas de nacido, no solo duele por la situación en sí misma, sino porque refleja la situación de la sociedad.
Por esto, como voluntarias nos comprometemos a auxiliar al desprotegido, a reparar un daño natural, a accionar en otras tantas causas que necesitan de nosotros desde nuestro trabajo, nuestro conocimiento, nuestra profesión, nuestra voluntad. Es aportar lo nuestro en pos de algo muy grande porque no estamos solos… cada vez son más quienes se dan cuenta de la importancia de participar para construir una sociedad mejor porque la acción y la participación da los resultados que la crítica no está dando.
¡Espero que leas estas líneas con esperanza, decisión y te sumes!
Podés ser un voluntario en el Hogar Lourdes o en la institución o causa que merezca que dediques tus horas libres en pos de un mundo mejor… hay un antes y un después de esta decisión… los voluntarios no sentimos que “nos falta algo”… nuestra vida está plena.
Pongo toda mi esperanza en quienes lean estas líneas pues creo firmemente en un mundo mejor, como creo que los sueños pueden ser reales si estamos decididos a cruzar las barreras que nos separan de ellos.
Ser un voluntario es tu decisión, es parte del cambio que la sociedad necesita. Un acto que expresa la libertad y lo que verdaderamente somos, lo que nos hace ser únicos e irrepetibles.
¡El Hogar Lourdes te espera!
¡Hoy puede ser un día que recordarás en tu vida si decides ser un voluntario!
Arq. Sandra Cortés
Fundadora Hogar Lourdes
Celular 011- 15-5183-5168
2 comentarios:
Bien Oliver! Excelente Entrada y claro, tu compromiso y energía son absolutamente contagiosos!
Soy voluntaria en la actualidad y doy clases de apoyo a estudiantes secundarios en Historia, Literatura e Inglés. Mis tiempos, como los de todos, son cortitos, pero bueno, estamos.
¿Verdad que no nos vimos en la reunión de bloggers el viernes pasado? No puedo ser tan despistada! Decime que No!
Un besito!
Susana:
Estoy segura que estarás haciendo muy bien lo tuyo, la calidad de tus posts de historia son impecables!
En cuanto a la reunión, dije que iría pero se me complicó la preparación de un final y me resigné a no ir. Lamenté mucho no haber ido puesto que hace rato que no veía a los chicos.
La próxima sera.
Besos!
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