Un basural a cielo abierto de amianto (asbesto), una sustancia altamente cancerígena y prohibida en 52 países incluido en la Argentina, puso en alerta a la localidad de González Catán, en la Cuenca del Riachuelo, y motivó una denuncia judicial por parte de funcionarios locales y de organizaciones ambientalistas.
Se trata de residuos de asbestos esparcidos en forma ilegal por la empresa Eternit S.A. en un terreno de esa localidad de La Matanza, informaron desde la ONG Greenpeace, que ayer desplegó en el lugar un cartel gigante para alertar a la población y a las autoridades. A ello, sumaron una denuncia judicial contra la empresa junto con el concejal de La Matanza Edgardo Lobos, con el patrocinio del abogado Enrique Viale, presidente de la Asociación Argentina de Abogados Ambientalistas (AAdeAA).
"Este basural tóxico evidencia una vez más que la calamitosa situación ambiental y social de la cuenca, no se reduce únicamente a la contaminación de los cursos de agua del Riachuelo, sino que se expande sobre todo el territorio afectando la salud y calidad de vida de la población", manifestó Consuelo Bilbao, coordinadora de la Campaña Riachuelo de Greenpeace.
De acuerdo al informe "Residuos de Asbestos en la Cuenca Matanza Riachuelo" presentado por los ambientalistas, los residuos de asbestos se encuentran esparcidos en un terreno de González Catán sin ninguna medida de seguridad y control a escasos metros de zonas urbanas.
El documento sostiene que la empresa Eternit fabricó productos de fibrocemento con fibras de asbesto hasta 2003, cuando se prohibió su uso, y que estos residuos fueron dispuestos a partir del año 1998, cuando la entonces Secretaría de Política Ambiente de la Provincia de Buenos Aires (actual Organismo Provincial para el Desarrollo Sostenible), autorizó el predio para la construcción de una celda de seguridad.
"El predio poco se asemeja a una celda de seguridad. No cumple con la señalización exigida para residuos peligrosos, ni con la franja perimetral que se establece por Ley, tampoco cumple con la cubierta reglamentaria para aislar los residuos del ambiente. Es escandaloso como han dejado estos residuos altamente peligrosos”, expresó Felix Cariboni, integrante de la Campaña Riachuelo de la organización.
Por su parte, el abogado de AAdeAA manifestó que "la empresa Eternit S.A. debe sustentar los gastos que resulten necesarios para el desarrollo de las acciones de recomposición del daño ambiental colectivo generado". Y destacó: "Resulta evidente la arbitraria omisión en el ejercicio del poder de policía por parte de la Autoridad de Cuenca Matanza Riachuelo, la ACUMAR, que surge tanto de las facultades que emanan de la Ley 26.168 que la crea, como de la sentencia del 8 de julio de 2008 de la Corte Suprema".
Los ambientalistas reclaman a Eternit S.A. que tome de modo urgente todos los recaudos y las medidas necesarias para disponer de manera segura los residuos de asbesto y que remedie totalmente el pasivo ambiental del predio de González Catán. Además, exigen a la ACUMAR, responsable del saneamiento del Riachuelo, que verifique y controle que Eternit implemente todas estas medidas.
Fuente: Perfil.com