23 de octubre de 2007

Elecciones 2007.


Se acercan las Elecciones. Votamos quién dirigirá los destinos de nuestro país los próximos 4 años. Votamos también la renovación de la mitad de las cámaras alta y baja del Congreso Nacional. Votamos a Gobernadores de varias provincias e Intendentes también.



¿Cuánta gente irá a emitir su sufragio?
Antecedentes:
Elecciones Presidenciales 2003: 78,22 de votantes del padrón sufragaron. De ese porcentaje, el 97,28% fueron positivos.
Elecciones Legislativas 2003: 57,3% de votantes del padrón sufragaron. De ese porcentaje, el 96,5% fueron positivos.
Elección Jefe de Gobierno 2007: Primera Vuelta: 69,2% de votantes del padrón sufragaron. Segunda vuelta: sólo el 68,38% sufragaron.


La democracia argentina pasó a ser, en sentido fáctico, una autocracia, donde el Presidente Kirchner maneja prácticamente los tres poderes. Interfiere en todas las decisiones de la Justicia, habiendo "renovado" la Suprema Corte a manos de un Consejo de la Magistratura armado a dedo, posee una mayoría automática en el Congreso y tiene un Jefe de Gabinete con superpoderes que le otorgan una nula transparencia al manejo del Presupuesto Nacional.
La gravedad institucional se cimenta sobre las bases de la apatía del pueblo por la política en general.
La política pasó a ser sinónimo de trampa, rosca, clientelismo, planes "trabajar", negociado, enriquecimiento personal y muchos otros sinónimos más que, en su totalidad, son negativos.
Lo más grave es que el ciudadano común, el habitante del suelo argentino, no nota que su vida está regida por todo un universo de decisiones políticas. Todas estas decisiones, mal tomadas, inciden en mucho más que una generación de argentinos, inciden en por lo menos dos generaciones de argentinos por nacer, ancianos, personas comunes y hasta en el precio de lo que pagan por una papa.
La ausencia de política de educación para consolidar un modelo de país fuerte, con mano de obra capacitada, con profesionales bien pagos, con gente segura, que confíe en las instituciones que las deban proteger, es una consecuencia de la apatía política.
"Esos políticos", "Yo voy a llevar una feta de salame", "una figurita de montoto", "Yo no voy a votar ni en pedo", "no me interesa votar", son frases horribles para la vida de todos los hombres que habitan el suelo argentino y de todos los niños por nacer.
Comprometerse con la política es ser patriota, es pensar una patria a futuro. Es querer vivir mejor. Buscar la solución definitiva a los problemas que se emparchan para las elecciones o se tapan con noticias estruendosas.
Muchos deberán pensar en participar activamente en la política para aportar su conocimiento y lucha para lograr ese objetivo.
Otros, simplemente, deberán votar. Ejercer su derecho. Sí señores, votar es nuestro derecho.

Les dejo un texto corto, escrito en 1933 por Bertolt Bretch.

El peor analfabeto es el analfabeto político.

El peor analfabeto es el analfabeto político.
No oye, no habla, no participa de los acontecimientos políticos.
No sabe que el costo de la vida, el precio del poroto, del pan, de la harina, del vestido, del zapato y de los remedios, dependen de decisiones políticas.
El analfabeto político es tan burro que se enorgullece y ensancha el pecho diciendo que odia la política.
No sabe que de su ignorancia política nace la prostituta, el menor abandonado, y el peor de todos los bandidos que es el político corrupto, mequetrefe y lacayo de las empresas nacionales y multinacionales.

Gracias Mr. Groncho por el post inspirador.

7 comentarios:

Claude dijo...

Escribís con mucho ímpetu y buen ánimo, sin rabia. Eso está muy bueno. A nadie le gusta sentir como si le estuviera tirando basura, aunque fuera basura verdadera.
Yo tengo resuelto mi voto para la primera vuelta: López Murphy.
Pero tengo cierto dilema para el ballottage (si lo hay): es casi seguro que Ricardo no llega a esa instancia, y todos dicen que tendré que optar entre Carrió y Lavagna y que tengo que resignarme a uno de ellos como el mal menor contra Kris.
Pero a mí me resultaría muy humillante tener que votar por uno de esos y creo que no lo voy a hacer. Además, tengo la convicción de que harían un gobierno muy parecido, si no idéntico, al del Matrimonio K.
Muchos me dirán, muy probablemente con razón, que estoy equivocado, pero igua, omo ciudadano y votante, continúo en una situación horrible.

Nicolás Lucca dijo...

Lo lamentable es que con el ausentismo de los que se sienten resignados, se benefician los que llevan a votar en micros a los que no saben nada.
Faltan que eliminen Educación e Instrucción Cívica del Secundario, total, ya nada de lo que se enseña en esas materias se ve en la realidad.

Ramón Indart dijo...

Esperemos que los jovenes seamos conscientes de la votacion. No es cuestion de elegir en el cuarrto oscuro al primero que llegue...Sino nos seguiran cog..de parados

F. Fabian S. dijo...

Hace unos años me dio el impetu civico y me mande a renovar el dni. 4 años hace.
Vivo en Temperley, voto aun en Bariloche.
No me dejan vivir y ahora no me dejan votar.
Malditos inutiles, tanto cuesta pagar un data entry?

Anónimo dijo...

Me sumo al primer posteador en el mismo dilema. Mi voto iría a López Murphy sin dudarlo, pero en este punto todo me suena a que se trata más de una contienda de ética vs. todos los males K descritos en la entrada del blog, por lo que cualquier candidato con chances de enfrentarse al aparato representa una oportunidad.

En este sentido votaría a Carrió como -dicen- la única capaz de juntar voto suficiente para llegar al ballotage. Claro que, en ese improbable futuro en que Carrió se impusiera, ¿cuál es su capacidad para gobernar un país? ¿No sería peor el remedio que la enfermedad, y daría una credibilidad ficticia al aparato K en caso de que quemara su chance?

Claro que esto me lleva a preguntarme si es que algún candidato opositor tendría chances de hacer un gobierno en paz, con toda la maquinaria de apriete que se ha formado en estos años. Prefiero ni siquiera pensar en eso... :-S

A tres puntas dijo...

Oliverx, lo que decís de la apatía de la sociedad con la política es cierto, pero cuidado que los datos que das de la elección de 2003 estan errados.
En la última elección presidencial participó el 78,21% (no el 71,6%) del padrón y el voto positivo fue del 97,28% (no el 85,9%). La gente tiende a participar más en las presidenciales.

Tincho

OliverX dijo...

Tincho: Busqué los datos de varias fuentes... diferían entre lo que vos decís y lo que posteé. Ahora encontré los datos del Ministerio del Interior y los corrijo.
Abrazo.