Ya habíamos hablado de Miguel y su ingenioso
"Proyecto Ambulatorio". Dicho proyecto camina sobre ruedas y ya ha instalado, con el aval de vecinos voluntarios, varios "techos" para perritos de la calle. La iniciativa requiere solamente de tu ayuda en forma de materiales. No se necesita dinero, nada más que una mano amiga que quiera colaborar con este Vector de Conciencia con mayúsculas.
Les propongo difundir este afiche entre sus conocidos, quién sabe, tal vez la idea corra como reguero de pólvora provocando un
"efecto mariposa".
Piensen que nuestra sociedad organizada en un Estado con Instituciones, se plantea la protección de los más indefensos, pero se limita a los seres humanos. Nuestros amigos de cuatro patas no tienen esa suerte, más bien todo lo contrario. Los
centros de zoonosis no hacen otra cosa que apilarlos, y darles el trato que refleja la sociedad, exclusión, indiferencia, abandono y muete.
Ni siquiera existen políticas para el control de la población animal.
Es por esto que surjen en la sociedad, anticuerpos como los que encarnan
Ángela Bartuli o Miguel Medina. La idea de esta difusión de Vectores "abrementes" es la de que te animes a seguir su ejemplo, ya sea en lo práctico o en la difusión de sus actividades para sumar más seres comprometidos con la causa.
Nuestro fin es terminar con la indiferencia y el especismo humano. La raíz de nuestra violencia es la acción/inacción ejercida contra los animales no humanos. El ser indiferente ante un animal no humano que sufre, es no tener la capacidad de ver en ellos a un ser sintiente, un inocente que necesita de nuestra solidaridad y que bien puede ser el reflejo de otras situaciones que ignoramos por completo, como el abandono de millones de personas a su suerte, en medio del hambre, la pobreza y la guerra.
La única posibilidad para el cambio es creando conciencia.