Una perra heroína salva a un bebé abandonado.

El hecho ocurrió esta madrugada en una casa de La Plata. El dueño de la vivienda se percató de la situación cuando escuchó el llanto del bebé, que se encontraba en la cucha junto a los perritos. Enseguida dio aviso a la Policía, que trasladó al recién nacido hasta un hospital de la zona.
Guiada por su instinto maternal, una perra llevó junto a sus cachorros a un bebé recién nacido que encontró abandonado en una quinta de la localidad de Abasto, en La Plata, informaron hoy fuentes policiales. Así la perra cobijó al pequeño y lo resguardó del frío. El propietario de "China" –tal el nombre de la perra heroína- al percatarse de lo sucedido llamó a la Policía, que enseguida se presentó en el lugar y trasladó al pequeño al hospital de Melchor Romero.
El hecho ocurrió esta madrugada cuando un hombre llamó a la seccional 7 dando aviso del hallazgo del bebé. Al llegar al lugar el propietario indicó a los policías que su perra halló al recién nacido y lo trasladó hasta su cucha, en un galpón de una quinta ubicada en calle 506 entre 197 y 198. El dueño de casa se percató de la situación al oír el llanto del bebé. El bebé se encontraba completamente desnudo y presentaba algunas lesiones por las que fue trasladado al centro de salud, donde aún se encuentra internado. Los médicos del hospital dijeron que la criatura tiene muy pocas horas de vida y 39 semanas de gestación. La causa fue caratulada como abandono de persona, y está a cargo de la titular de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 1, Ana María Heredia, del Departamento Judicial La Plata.

Actualización:
Poco después de que el caso fuera difundido, la mamá de la chiquita, una adolescente de 14 años, fue llevada por un vecino hasta el hospital adonde se encuentra la beba. Ella también quedó internada. Se estima que mañana sea dada de alta. La Policía confirmó que la joven dio a luz anoche en pleno campo, en la zona rural de la localidad de Abasto y, tras abandonar a la nena, escapó del lugar.

Fuente: DyN.

Las palabras sobran. Imaginen el cuidado que tuvo China en el traslado de ese pequeño recién nacido, desnudo y en llanto. Imaginen, sabiendo las bajas temperaturas registradas anoche, lo vital de su acción para que esa vida humana no se pierda.

Imagino a un gran hombre, agradecido por siempre con quien lo salvó de una muerte segura. Cargando con la cruz del abandono materno, pero confiando en ser símbolo de amor sin barreras, sin especies que ejerzan la tiranía por sobre la verdad de la naturaleza.

No se puede juzgar a esa precoz madre, aún habiendo desconocido su instinto maternal. Alguien asistió a ese parto. Alguien cortó el cordón umbilical. Hay adultos responsables de este acto. De ese embarazo prematuro. De esa vida trunca. Hay una sociedad que no logra plantearse su función de contención y ejercicio de la ciudadanía para exigir las políticas de educación y prevención que están ausentes en cada acto de injusticia y desprecio por la vida.

Sólo nos queda recordar una frase de San Francisco de Asis:

"Si existen hombres que excluyen a cualquiera de las criaturas de Dios del amparo de la compasión y la misericordia, existirán hombres que tratarán a sus hermanos de la misma manera."