Muchas personas se alarman y se agolpan frente a las unidades sanitarias para vacunarse ante la posibilidad de un brote epidémico de fiebre amarilla. Lo más preocupante no es la falta de previsión por parte de las autoridades en materia de contención e información a la población sino que no se están tomando los recaudos para evitar que se produzca una verdadera epidemia.
Veamos de qué se trata esta enfermedad, cómo se contagia y cómo se previene:
¿Qué es la fiebre amarilla y cómo se contagia?
La fiebre amarilla, o vómito negro (también llamada la Plaga Americana), es una enfermedad viral aguda e infecciosa causada por "el virus de la fiebre amarilla", que pertenece a la familia de los Flaviviridae, y del género Flavivirus amaril. Es una causa importante de enfermedad hemorrágica en muchos países de África y sudamérica, a pesar de la existencia de una vacuna efectiva. Lo amarillo de la enfermedad se refiere a los signos de ictericia que afectan a algunos pacientes.
Es transmitida por la picadura del mosquito Aedes aegypti y otros mosquitos de los generos Aedes, Haemagogus y Sabethes. En la fiebre amarilla de transmisión urbana hay que recordar que Aedes aegypti abunda en zonas húmedas alrededor del agua estancada, y sólo pica durante el día.
Es el mismo mosquito que transmite el DENGUE. Como vemos es un vector que, bélicamente hablando, puede cargar distintas "ojivas". El mosquito pica a una persona infectada y se convierte inmediatamente en vector de contagio.
¿En qué consiste la enfermedad?
El período de incubación se sitúa entre los 3 y los 7 días. La duración de la enfermedad en caso de curación es de una a dos semanas. Tras el período de incubación cabe distinguir dos formas clínicas: la leve y la grave o clásica, registrándose también formas de gravedad intermedia.
Forma leve:
Es poco característica y sólo se sospecha en zonas endémicas y especialmente durante las epidemias. Comienza bruscamente con fiebre elevada, escalofríos y dolores de cabeza. Pueden existir, además, mialgias, náuseas, vómitos, etc. Suele durar de 1 a 3 días y curar sin complicaciones.
Forma grave o clásica:
Tras un período inicial similar al anterior, en el que pueden existir además sangrado nasal y de las encías, se produce un descenso febril (remisión). A continuación reaparece la fiebre, se instaura ictericia (100% de los casos) y puede aparecer insuficiencia hepática o renal y agravamiento de las hemorragias nasales, de las encías, aparición de un punteado paladar blando y vómitos de sangre negra y coagulada (vómito negro) (20% de casos).
¿Cuál es el tratamiento?
No existe tratamiento eficaz para la fiebre amarilla, justificando la importancia de la vacunación. En los casos graves está indicado el tratamiento sintomático y de soporte, particularmente la rehidratación y el control de posible baja de presión arterial. La mortalidad global es del 5% en poblaciones indígenas de regiones endémicas, aunque en los casos graves, en epidemias o entre poblaciones no indígenas, hasta el 50% de los pacientes pueden fallecer. Ciertos casos resultan en insuficiencia renal aguda por lo que la diálisis es importante.
¿Cómo se puede prevenir, señores responsables del sistema de salud nacional?
El mismo esquema de combate contra el dengue. Eliminando a los criaderos del Aedes Aegypti.
Desde el Estado: FUMIGAR espacios verdes y demás sitios de posible desove del mosquito.
En casa, hay que eliminar toda posible fuente de agua estancada: Baldes, tachos, cubiertas viejas, macetas, etc.
Vacunación: La vacuna comienza a ser efectiva a partir de los 10 días de su inoculación. Es recomendable para aquellos que viven en zonas cercanas a los focos de contagio que han sido denunciados al momento.
Y esta va de yapa....
¿Porqué nos pican los mosquitos?
Sólo las hembras de los mosquitos tienen la NECESIDAD de hacerlo. Nuestra sangre es una fuente de proteínas indispensables para alimentar a sus crías. Se basan en nuestras pequeñas emanaciones de gas carbónico que desprende nuestra piel para detectarnos. Tanto las hembras como los machos, se nutren del néctar de las plantas y otras sustancias azucaradas.
Antecedentes de epidemias por fiebre amarilla en Argentina.
Fuentes: Wikipedia.
Infectología y enfermedades infecciosas, E. Cecchini.