Tiene portación de apellido y su parecido físico es notable: es Néstor con peluca. Mide bien en las encuestas, pero le falta metáfora, épica, anécdotas falsas o verdaderas que la transformen en un ser especial para el imaginario popular. Hoy es Néstor en Santa Cruz: tiene un pasado vinculado con la dictadura, fomenta el clientelismo como elemento indispensable para la construcción política, tiene un divorcio escandaloso y es víctima de algunos chismes de peluquería. Quienes le adjudican a Él, poderes de estampita y clarividencia sostienen que cuando nombró a Alicia en el Ministerio de Reparto estaba simplemente señalándole su destino: quien reparte es un Kirchner, recuérdenlo, como recordaron durante décadas a quien repartía máquinas de coser o bicicletas.
Al menos tres encuestadoras la ubican tercera en la proyección de su imagen positiva: tercera después de Scioli y Cristina, en ese orden . Para la Universidad de La Matanza alcanza Alicia un 41,7% de imagen positiva en la provincia de Buenos Aires, con una baja calificación negativa: 17,5%. En el mismo informe, sobre 1.753 casos encuestados entre junio y julio, se señala que la gestión está valorada incluso mejor que su imagen . La muestra encargada por el Gobierno a Doris Capurro, de Ibarómetro, tiene resultados similares.
Kirchner al fin, Alicia tuvo en estos días el último coletazo del escándalo por las tierras fiscales de El Calafate: adquirió el año pasado dos terrenos de 833 metros cuadrados cada uno por un total de 11.000 pesos, a $ 6,58 el metro cuadrado . El cuarto de manzana comprado por Alicia está en la zona del aeropuerto viejo, donde se proyecta instalar un circuito comercial en el que el metro cuadrado se cotiza entre 50 y 200 dólares . Fuentes de El Calafate confirmaron a este diario que Alicia, en verdad, había comprado los terrenos cuando Néstor, Cristina y la mitad más uno del kirchnerismo hicieron lo propio, pero recién los escrituró el año pasado. De haberlo hecho antes, su hija Natalia hubiera tenido que excusarse de investigar la causa de las tierras fiscales denunciada por Alvaro de Lamadrid en 2008. En el fondo, una formalidad, ya que Natalia -fiscal de El Calafate desde que el cargo fue creado- también se investigaba sí misma .
La fiscal Natalia Mercado -sobrina de Néstor y Cristina y una de las dos hijas de Alicia- vive en El Calafate junto a su esposo Patricio Pereyra Arandía (que figura junto a Romina Mercado como director de Hotesur SA, controlante de uno de los hoteles K) en una casa construida sobre un terreno fiscal que compró a un precio irrisorio en el barrio Las Plumas. Intuición o destino, las dos hijas de Alicia Kirchner y Bombón Mercado se vincularon con el poder judicial de la provincia : una de ellas, la fiscal; la otra, Romina de los Angeles, de 37 años, ex pareja del juez Santiago Lozada, que tuvo a su cargo varias causas contra el tío Néstor y cerró la investigación por la presunta malversación de fondos de Santa Cruz en el exterior. Romina también forma parte del directorio del Hotel Alto Calafate y tiene un departamento en Puerto Madero a una cuadra de la torre donde nunca se cruzaron Boudou y Vanberbroele . No está mal para una empleada del Banco Nación de Río Gallegos.
“Mercado fue el tipo que le tira los primeros trabajos a Néstor y a Cristina cuando volvieron a Santa Cruz en la época de la dictadura”, comenta a Clarín Carpincho Varela, periodista del diario catamarqueño El Ancasti.
En esos años Néstor trabajaba como abogado inmobiliario y Mercado, desde la conducción del SUPE (Sindicato Unico de Petroleros del Estado) comenzó a acercarle clientes.
“Diego Ibáñez, del SUPE, y Domingo Petracca, titular del Sindicato de Cementerios, le pagaron la candidatura a Néstor para la intendencia en Santa Cruz, con Bombón como intermediario” , recuerdan fuentes políticas locales.
“
Lo rajaron de Santa Cruz cuando se separó de Alicia” , afirman en Río Gallegos.
Bombón tenía un cabaret y Alicia una boutique . Un día vistió a la pibas y las puso de maniquíes en la vidriera de la mujer. Se pudrió todo. Después del papelón aquel cerraron el negocio.
El día de la transformación de los maniquíes en chicas de vida breve, alegre y disipada es parte de la historia mítica de la provincia . El exilio catamarqueño de Bombón fue parcial: allí descubrió a Lucía Corpacci -actual mujer de su sobrino, Angel Mercado, ministro de Producción- que fue diputada, senadora nacional, vicegobernadora y ahora gobernadora de la provincia de Catamarca, un comodín K para todos los puestos.
Aquellos años se transformaron en el currículum de Alicia en un error de tipeo: “Subsecretaria de Acción Social de la provincia de Santa Cruz.
1. en 1983. 2. en 1975 ” (sic) dice, dando a entender, en Reposo style , que fueron dos etapas diferentes. Alicia fue funcionaria de la dictadura, ocupando la Subsecretaria de Acción Social entre 1975 y 1983 con rango de viceministro . Comenzó su carrera con López Rega y renunció después de Malvinas. Entonces se repartía mercadería en los Falcon verdes bajo la conducción de un ministro con rango de coronel.
Elvio Macchia fue la última pareja de Alicia y murió en octubre de 2010 luego de una operación programada. Cristina no asistió ni al velorio ni al entierro. Elvio era abogado y asesor de Alicia, y vivía en San Pedro.
Según el diario Libre , Alicia también estuvo vinculada sentimentalmente con Sergio Berni , que fue director de Asistencia Crítica y subsecretario de Abordaje Territorial en el Ministerio de Reparto, y es actualmente segundo de Nilda Garré. Este ex militar, elogiado asiduamente por el ministro sin cartera Horacio Verbitsky, le ofreció “dibujar” el mecanismo para conseguir planes sociales a un prófugo de la Justicia . Según publicó en este diario Omar Lavieri en 2010, la SIDE escuchó esa conversación porque buscaba desde 2009 a Manuel Roberto Martino, jefe del Frente de Acción Revolucionaria (FAR), el grupo que había atacado a los asistentes al acto del 61° aniversario de la creación del Estado de Israel . Martino estaba prófugo y llamó a Berni desde el celular de su pareja. Necesitaba fondos para solucionar un problema con un galpón donde funcionaba una cooperativa de confección de guardapolvos del FAR.
“Negocien el precio -le dijo Berni-.
Suponete que nosotros podamos conseguir 30 o 40 lucas, que lo hagamos vía algún proyecto… y veamos de qué proyecto podemos sacar 40 o 50 lucas más… tenemos que poner imaginación, fantasía, dibujar y vos sabés… a mí poner 50 o 100 mil pesos no me mueve el amperímetro , es lo mismo, ¿entendés? El tema es generar el mecanismo para conseguir la plata” .
Después de aquello Berni fue ascendido, y la causa vegeta en el juzgado de Sergio Torres.
La otra relación que el diario Libre le adjudicó a Alicia también tuvo sus problemas legales: Carlos Castagneto, ex jugador de fútbol, es su mano derecha en el Ministerio de Reparto y fue denunciado en 2005 por el entonces diputado Jorge Rivas ante la Justicia junto a Marcela Paola Vessvessian por una maniobra de compra de votos para las legislativas de ese año y para las elecciones a intendente de La Plata en 2007, donde Castagneto fue candidato: compra de votos a través de entregas de reproductores de DVD, lavarropas, heladeras, chapas y colchones.
“La están sacando mucho al conurbano” , dijo a este diario un ex funcionario K.
Las denuncias de clientelismo se multiplican con sus apariciones. La política del lavarropas es, también, de premios y castigos : Barrios de Pie vio cómo 30.000 planes sociales se disolvían en las aguas de la crítica. Mientras tanto, Alicia crece . Tiene entre sus manos el método más viejo de la política. Y sabe usarlo.
Investigación: JL/María Eugenia Duffard/ Amelia Cole
Por Jorge Lanata para clarin.com.